PEDRO DOBAO : EN BUSCA DE LA LIBERTAD.

Pedro Dobao nació en el verano de 1945 en Arnado. Una aldea de la comarca de Valdeorras (Orense), en la que había un castillo y una condesa. La ocupación de la mayoría de los habitantes de Arnado era la agricultura, además de trabajar en la casa de la condesa; pero Pedro supo desde muy niño que lo de el no iba ser el trabajo del campo, ni los oficios clásicos de los chavales de su tiempo.

En su infancia pasaba mucho tiempo en la casa de la condesa, por el medio de los muebles finamente tallados, escuchaba a doña Pilar tocar el piano, y en la biblioteca, en la que había libros con láminas que a Pedro siempre le entusiasmaron, Pedro se entretiene tallando madera con su navaja, y la condesa decide regalarle las gubias que utilizaba su difunto marido, que era aficionado a la ebanistería; este fue su primer material de trabajo.

A los 15 años se traslada con su familia ó Barco de Valdeorras, y allí trabajó en un taller de ebanistería, aprendiendo a trabajar la madera y los rudimentos de lo que seria su oficio. Pero fue a los 18 años, haciendo el servicio militar en Coruña, cuando se dio cuenta que su sitio no esta en una aldea pequeña, sino en una ciudad, donde realmente podía ampliar los horizontes de su vocación.

Al finalizar el servicio militar volvió al Barco de Valdeorras, pero enseguida marchó a Madrid: lo suyo no era la ebanistería, tenia muy claro que su futuro estaba en la escultura. En Madrid estudio en la Escuela de Artes Aplicadas, dependiente de Bellas Artes; allí conoció a Alonso Coomonte y a Juan Piñeiro, que se dieron cuenta que el chaval tenia condiciones para la escultura y lo llevaron a sus talleres.

En Madrid Pedro Aprende todo el tiempo: aprende técnicas escultóricas y también aprende a trabajar nuevos materiales, además de la madera, la piedra, el bronce, que será uno de los materiales preferidos.

En 1970 se traslada a Barcelona, donde monta su propio taller y empieza a hacer obras por encargo, estas obras tienen su sello personal, pero está condicionado por las circunstancias del encargo. Es en esta época cuando se casa y nace su primer hijo.

En 1975 decide instalarse definitivamente en Galicia y fija su residencia en Vigo, en esta época nace su segundo hijo. Vive en un piso pequeño con su familia, de hecho lo limita bastante a la hora de realizar su trabajo. Así es cuando se traslada a la parroquia de Valladares, a vivir en una casa, cuando el artista empieza a trabajar sin cortapisas, y a partir de aquí es cuando sale su verdadera personalidad.

Sus trabajos se caracterizan por los contrastes, tanto en los materiales ( trabaja con piedra y bronce, piedra y resina, madera y metal….) como en las formas: una distribución harmónica de rectas y curvas, de formas simétricas y asimétricas.

Sus obras tienen un denominador común: el dramatismo y la busca de la libertad. Por lo que llevo dicho de la vida del autor, nos damos cuenta que siempre tuvo inquietudes: no quiso quedar en su aldea pequeña, porque allí no tenia futuro en lo que a el le gustaba ( aunque siempre estuvo muy unido a su aldea y su familia ) fue superándose día a día, liberándose de ataduras a la hora de trabajar, para llegar al día de hoy, como uno de los mejores escultores del panorama gallego contemporáneo, si dejar de aprender y de superarse día a día.

 

Mercedes Nogueira Dobao

Licenciada en Historia del Arte