ESCULTURAS DE PEDRO DOBAO
En los últimos
veinte años han sido muchos y muy importantes los museos y centros culturales
de arte que han abierto sus puertas en España. Si lo trasladamos a la Comunidad
Autónoma de Galicia los resultados han sido espectaculares, gracias a la importante
inversión que se llevó a cabo para los nuevos museos y centros de arte, tanto
de titularidad pública como privada, esto ha conseguido una gran riqueza
dinamizando la cultura local de las villas y ciudades. Así, comprobamos que el
interés y el conocimiento adquirido por las artes ha ido creciendo día a día, y
hoy una ciudad por muy pocos habitantes que tenga dispone de su Centro de
Exposiciones bien sea en un edificio histórico u otro espacio bien rehabilitado
y transformado que reúna las condiciones idóneas y con capacidad para instalar
sus colecciones de arte unas fijas y otras itinerantes.
Con todo ello,
el arte de proximidad llega al ciudadano que puede disfrutar de esas obras,
cuyos artistas pueden darse a conocer en su ciudad, provincia y Comunidad
Autónoma, y de otros consagrados que hace años sería impensable poder disfrutar
de su obra sin tener que hacer largos viajes para poder estudiarla, analizarla o simplemente
contemplarla, como ocurría en el pasado.
Tratando de matizar estas
consideraciones, vemos como este artista no utiliza los espacios de arte cerrados referidos
anteriormente, en distintas ocasiones, ya que su obra de concepción
geométrica, con el transcurrir del
tiempo la ha ido situando en los
paisajes de las distintas urbes y parroquias, en distintos pueblos y ciudades
de su Galicia que siente en el alma, para así ser disfrutada al aire libre. Así
en el municipio de As Neves vemos
las obras “Liñeira” y “A la familia”, en A Guarda “Arquitectura”,
“Mujer desconsolada”, Villamartín de Valedoras “El emigrante”, Carnota “Tenaces do vento”, Vigo “muller traballadora”,
y así sus esculturas también está en Santiago de Compostela, Rivadavia,
Celanova, Poio, etc.
En ocasiones, es importante
recuperar los propios recuerdos, y lo hago al comienzo con la introducción
haciendo referencia aproximadamente al año 1989, porque recuerdo esa fecha como
la de una obra que yo he estado estudiando e investigando del escultor Pedro
Dobao titulada “custodia do pensamento”, un trabajo en hierro
forjado en el que su autor ha demostrado un profundo conocimiento de la materia
y que nos traslada a la dureza cruel de la vida, pero también este escultor ha
sabido llevar a cabo a través de otras obras las distintas facetas de la
existencia, trabajando diversos materiales como ese amor tan dulce llevado a
cabo en bronce, denominado “parella”. Antes de seguir refiriéndome a su
obra, hay que hacer referencia al artista, como núcleo básico de este estudio
que va a versar sobre su obra y su persona.
¿ Quién es el escultor Pedro Dobao
?. De origen humilde y con una gran vocación artística nació en el año 1945 en
O Barco de Valdeorras, villa típica que
goza de un interesante núcleo monumental, conocida por su importantísima
actividad de pizarra y por sus viñedos. Está rodeada de un hermoso paisaje y
enclavada en la provincia de Ourense.
Le gusta recordar de su niñez,
entre otras cosas, a aquel aristócrata conde de Torrepenela que
cariñosamente le llamaba Perucho, y como la condesa atraída por la
habilidad del niño en la talla de madera, le regala un surtido de gubias, que será su primer herramental como escultor.
Así, aquel chiquillo comienza su andadura iniciando su oficio de tallista, hasta que puede llevar a cabo su formación académica y ya a través de la creación artística llegar a la escultura.
Dobao también viaja para formarse
y conoce distintos conceptos escultóricos, nuevas materias, diferentes modos de
modelar, la talla en piedra y el paso del barro al bronce. Pasa por Madrid para
estudiar en la Escuela de Artes y Oficios, donde recibe la enseñanza de
conocidos profesores. Posteriormente, se traslada a Barcelona y con taller propio realiza
relieves y trabajos diversos que le encargan distintos arquitectos.
Pero el grueso de su obra y donde
transcurre su consolidación como artista es en Galicia y concretamente en Vigo,
donde actualmente reside.
Pedro Dobao “Perucho” en
un análisis de su trayectoria artística se observa una gran evolución que nos
traslada con esa concepción en volúmenes que desde un realismo primario visto
en su obra “liñeira”, se percibe en el tiempo como se aproxima a la
abstracción en sus esculturas actuales. Este artista incansable, trabajador en
su taller de Valladares-Vigo crea unas obras de gran belleza utilizando madera,
acero, bronce o resinas, y así nos presenta esa unión de espacio, arte, acción,
e introduce en una experimentación total del entorno que se confunde y asienta
dulcemente en el paisaje gallego.
De Perucho podemos hablar
bien o mal, decir que es muy serio, observador, parco en palabras, introvertido, muy buena
persona, pero lo que no podemos dudar es de la calidad de su obra. Preguntado,
dice que quiere trasladar en sus actuales trabajos la conflictividad humana,
no se duda viendo una de las últimas “custodio del pensamiento”.
Relacionado con la evolución del concepto de espacio y
sus interpretaciones en el arte, hace unas interesantes interpretaciones la
profesora Garcerán de la Universidad Complutense en las Jornadas de Arte en
Madrid, de las que transcribo alguna nota, y dice es evidente que el artista
como todo hombre, intuye que vive en un espacio multidimensional y complejo; un
espacio inapresable, misterioso y esquivo; un espacio afectado por el tiempo y la
velocidad; extenso, comprimido o blando como en un sueño de topólogo; un
espacio subjetivo que nada tiene que ver con la métrica inalterable. Pero el
hombre, en una intuición más fuerte que linda con la evidencia tiene asumido un
prototipo de espacio tridimensional, referenciado a las coordenadas cartesianas
que podemos considerar geométricamente espacio euclidiano.
Sigue diciendo la profesora,
este modelo de espacio fue suficiente y ha satisfecho las exigencias
científicas, técnicas y artísticas de la humanidad durante dos largos milenios.
No cabe duda que en el caso
que nos ocupa Pedro Dobao ha ido evolucionando en la dimensión de la
producción artística propia, trabajada desde su propia imaginación en el
espacio que es determinante al presentarla, motivando una situación de eficacia
comunicativa, para de esta forma llega a perspectivas de expresión sensible y
con un buen impacto dentro de lo racional.
José Luis Vázquez López
cional de Críticos de Arte